Son los pájaros más pequeños del mundo. La familia de los colibríes comprende más de 100 géneros que se dividen en un total de 330 a 340 especies. Antaño se les mató por millones a fin de decorar los sombreros femeninos europeos, lo que probablemente llevó al exterminio de varias especies.
Los colibríes están entre los pájaros más pequeños que existen. La especie de tamaño más reducido es el colibrí zunzuncito o elfo de las abejas (Mellisuga helenae),
que con su pico y cola mide apenas unos 6 centímetros. La especie más grande, el llamado colibrí gigante (Patagona gigas), mide unos 25 cm.
Una característica especial de los colibríes es el pico, cada pico representa una especialización a un tipo determinado de flor que le permite al colibrí en cuestión ocupar su nicho ecológico particular y de esa manera evitar la lucha con otras especies.
Los colibríes se alimentan principalmente de néctar de flores para obtener las calorías que les permiten volar, son atraídos especialmente por las flores de color rojo o naranja brillante.
Los colibríes son dueños de una poderosa musculatura pectoral y de una anatomía de atletas que los capacitan para batir sus alas a un ritmo imperceptible para el ojo humano, que no alcanza a ver más que una difusa neblina. Nuestro picaflor verde, por ejemplo, aletea de 36 a 39 veces por segundo, mientras que ciertos colibríes pequeños llegan a realizar más de 100 batidos en la misma fracción de tiempo. Entre los mayores, como el gigante, el aleteo es considerablemente menos rápido, y se acerca en semejanza al de una pájaro cualquiera.
Por otro lado, en los colibríes las articulaciones del hombro son muy flexibles, permitiendo a las alas describir movimientos horizontales y verticales imposibles para otras aves.
De esta manera, potencia y flexibilidad se unen para convertirlos en verdaderos acróbatas aéreos, capaces de realizar hazañas como volar de costado y hacia atrás, mantenerse estático frente a una flor aunque una fuerte brisa pretenda desequilibrarlo, o incluso, de dar vueltas en el aire como un trompo.
Curiosidad
Si desea que su hogar sea visitado repetidamente por esta deleitable avecilla, puede preparar alimento de colibrí fácilmente. Solo se necesitan 4 tazas de agua hirviendo, 1 taza de azúcar, esta mezcla se deja enfriar a temperatura ambiente. No se debe agregar ningún colorante; después de todo el néctar de las flores es transparente.
El aleteo del colibrí forma una figura: el simbolo del infinito. Es decir, un 8 acostado.
ResponderEliminarLa naturaleza volcó sus caprichos en las aves, mariposas, peces y flores, pero, el colibrí es algo fuera de lote por su belleza y cualidades para volar hacia adelante o atrás. Hay un colibrí con las patitas emplumadas blancas,independiente del color del ave, no he visto la foto, se encuentra en los límites de Portuguesa y Trujillo.
ResponderEliminar